La batalla de Belchite es una de las más desconocidas de la Guerra Civil española, a pesar de su gran importancia. Hoy, existen aún sus ruinas tal y como quedaron al acabar la batalla. El paso del tiempo va poco a poco destruyendo lo que las bombas no lograron. Unas ruinas testimonio de la barbarie de aquella guerra.
A finales de agosto de 1937, tras el fracaso de Brunete, los republicanos decidieron otra ofensiva de distracción que detuviese el ataque franquista a Asturias. Una gran ofensiva debería hacer una tenaza en torno a Zaragoza, la cual debería de caer y dar un golpe de propaganda, pues sería la primera capital de provincia que caería en poder republicano.
El 24 de agosto se inició la ofensiva. El 26 cayeron fácilmente Quinto, Mediana y Codo, llegando muy cerca de Zaragoza. Sin embargo, Belchite resistía. La población contaba con unos 3.800 habitantes y en esos momentos estaba bien fortificada, con una buena guarnición de soldados franquistas. Los republicanos decidieron tomarla al asalto, aún a riesgo de perder un tiempo precioso para proseguir con éxito el plan trazado. Tras ser rechazada una ofensiva de socorro de los nacionales (30 de agosto), la madrugada del 5 al 6 de septiembre, los asaltantes someten la ciudad, pero no pueden impedir una salida desesperada de sus defensores, algunos de los cuales logran sobrepasar las líneas enemigas y llegar a reunirse con sus tropas. A mediados de septiembre el frente estaba estabilizado sin que la capital aragonesa cayese y Belchite quedaba reducido a un montón de ruinas.
Ruinas de Belchite
Interesante como siempre, me ha entrado la curiosidad y me he paseado por Belchite, un pueblo alegre me ha parecido.
ResponderEliminarHola Mari-Pi-R. Hace ya muchos años que estuve por primera vez en Belchite y me parecieron fascinantes esas ruinas como testimonio histórico. Volví al año siguiente, allá por 1997 o 1998 y estaba bastante más ruinoso. Imagino que dentro de unos años las ruinas ya serán eso, ruinas en un montón de escombros. La foto es de aquél año.
ResponderEliminarUn saludo y muchas gracias por tu visita, fiel lectora.